"De mal en peor" Post Partido: Hércules C.F. 0 - 2 S.D. Huesca

Se acaban los adjetivos para calificar todo lo que está ocurriendo por la calle Foguerer Romeu Zarandieta. El Hércules vuelve a cosechar una nueva derrota en su estadio (ya van 3 seguidas) y lo que es peor, sexta jornada sin ganar y sin marcar. La visita a la Santa Faz no ha servido de nada y el equipo sigue sin reaccionar y de mal en peor. El sueño del ascenso parece esfumarse cada vez más. Esta noche, Gilvan, con dos golazos, ha dado los tres puntos al Huesca y ha agudizado más la crisis de un equipo que no levanta cabeza y que ha perdido su estrella en cuestión de un mes. Si mañana gana el Levante, los de Esteban Vigo saldrán de los puestos de privilegio. La malo del asunto es que Esteban no encuentra la solución y los jugadores están desaparecidos. O esto cambia ya o podemos despedirnos.

Inicio para los visitantes
De nuevo el Hércules salió al campo dormido en los primeros instantes. El Huesca se adueñaba del esférico y del juego lo que minaba todavía más la moral de los alicantinos, que no pudieron hacer su juego hasta los últimos minutos de la primera mitad. El Huesca no mordía pero sí que tenía las mejores oportunidades. Camacho, desde la frontal, lo intentaba sin suerte. Era el primer aviso de un conjunto que, como ya avisamos, no venía a pasearse ni mucho menos.

El Hércules, por contra, era un reflejo de lo que está siendo en estos últimos partidos, un querer y no poder. Sendoa, el único destacado de los primeros minutos, lo intentaba a base de voluntad pero de muy poca suerte antes del descanso. El vasco puso un centro a Deli que el montenegrino no pudo rematar bien por muy poquito. El Hércules se acercaba tímidamente al área rival pero el pitido del árbitro rompía el momento.

El Hércules lo buscó pero el Huesca se lo llevó
El inicio de la segunda parte volvía a dejarnos a un Hércules que buscaba el gol pero sin mucha eficacia y, sobre todo, sin mucha confianza. Sendoa y Tote trataban de hacer daño con jugadas entrelazadas y alguna que otra jugada personal, como una de Sendoa en donde el extremo vasco se quedaba sólo ante el portero rival. Mientras, Jorge Alonso, lo intentaba desde larga distancia. Pero todos se encontraban con un gran Toni Doblas, que a la postre se convertiría en el mejor de su equipo junto a Gilvan.

Y como quien perdona, al final la acaba pagando, el Huesca se repuso y volvió a tomar el control y a hacerse con el encuentro. Sin muchos alardes pero con la eficacia que le faltó al Hércules, los oscenses se pusieron las pilas y por mediación de Gilvan cerraron el encuentro en el último cuarto de hora. El delantero azulgrana dio tres puntos de oro a su equipo con dos golazos. El primero definiendo con un espléndido zurdazo dentro del área un buen contragolpe y el segundo, de nuevo en contraataque, y aprovechando un error del Hércules en el centro del campo, que rompía las telarañas de la otra escuadra ya en el tiempo añadido y con un Hércules más que entregado.

La esperanza es lo último que se pierde
Las sensaciones que deja este equipo tras esta nueva derrota son profundamente negativas. Cartagena, Betis y Levante, tienen ante sí una oportunidad magnífica de poder superar e igualar al conjunto de Esteban que ha dejado escapar, en este último mes y medio de competición, nada menos que los 11 puntos de ventaja que tenía con el cuarto clasificado. Ni las lesiones ni las sanciones son excusa ante este sorprendente bajón. La afición empieza a impacientarse, se escuchan los primeros pitos y a Esteban ya no le quedan argumentos para explicar lo que está pasando.

La foto de hoy lo ejemplifica muy claro. Cabezas bajas y miradas para otro lado en vez de buscar soluciones inmediatas. Encima, el próximo partido es en Soria, y ante el Numancia, que a buen seguro querrá tomar el último tren camino de Primera. Un tren que ya ha calentado los motores para iniciar su marcha y que dejará en tierra a todo aquel que no lo tenga claro. De momento, el Hércules es el que tiene más papeletas para perderlo. A 10 jornadas para el final no hay nada decidido todavía para nadie y ahora es cuando de verdad empieza lo bueno. Sólo nos queda confiar. Y es que, como dice el dicho, "la esperanza es lo último que se pierde".

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Foto: Diarioinformacion.com

(*) La sinapsis del partido: